Noticias En una entrevista de pareja aparece el relato de una mujer desesperada –podría ser un hombre también–: “Mi marido me hace la vida imposible con sus obsesiones, nos peleamos todo el tiempo por su necesidad de orden y simetría exagerada. Si las cosas no están donde él quiere, se pone irascible, la convivencia se hace muy difícil. Es un maniático de la puntualidad, ya casi no tenemos amigos, se enoja por cualquier cosa que no entre en sus parámetros de vida. Se violenta, discutimos, luego se arrepiente, nos reconciliamos y a los dos días vuelve a suceder lo mismo. Surgen de grandes angustias y enturbian los vínculos. Por dónde empezar.
Contenido extraido de: http://ift.tt/1213hEZ