Mundo Agencias AP, EFE y Especial Damasco. Algunos pensaban que era un niño, pero en realidad es una niña. Su nombre es Hudea. Con sus 4 años, es una de las habitantes de un campo de refugiados de Atme, en el nordeste de Siria. Su fotografía refleja el terror que provoca el grupo yihadista Estado Islámico (EI) y ya fue compartida por miles de usuarios en Internet. La fuerza de la imagen reside en que, cuando el fotógrafo Osman Sagirli se le acercó con su cámara, Hudea levantó los brazos en señal de rendición, como si le hubiesen apuntado con un arma. La pequeña levantó las manos ante una cámara de fotos que confundió con un arma. La imagen dio vueltas al mundo y reveló el horror que se vive en zonas ocupadas por el Estado Islámico.
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